El robo ideológico de la mujer

La manipulación ideológica ha distorsionado causas legítimas, como la defensa de los derechos de la mujer, convirtiéndolas en escenarios y movimientos prestos al vandalismo y, en algunos casos, de auténtico terrorismo. Tal es el caso de manifestaciones como el 8M y otras marchas que, bajo el lema de luchar por la mujer, terminan promoviendo la violencia y la división.